Es necesario ser justos, por ello me detengo en un aspecto del análisis, que casi nunca, y esta vez menos, las agencias de noticias tomaron en cuenta:
Cuba obtuvo 24 medallas, pero el conjunto de todos los países de América Latina y El Caribe, incluyendo a los superpoblados México, con casi 100 millones de habitantes y Brasil con 180, obtuvieron 42, es decir la Isla de Cuba con un poco más de 11 millones, obtuvo más de la mitad de todas las medallas de América Latina y el Caribe.
Pocos se han detenido a reconocer el esfuerzo de otros países, en muchos casos, con asesoría cubana, que se han sumado a la competencia, y la victoria en el deporte.
Todos los países de América del Sur obtuvieron 24 medallas, la misma cantidad que Cuba: Brasil 15, Argentina 6, Chile 1, Ecuador 1 y Venezuela 1. Uruguay, Paraguay, Bolivia, Perú y Colombia y las Guyanas, ninguna. La prensa no se ocupó de ellos. Nada dijo de la ausencia de medallas para Colombia con 42 millones de habitantes.
Los países del Caribe, a donde también pertenece Cuba, obtuvieron 17 medallas Jamaica 11, República Dominicana, Trinidad-Tobago y Bahama 2 cada una. De modo que el conjunto de países alcanzó 7 medallas menos que Cuba.
México y los siete países centroamericanos obtuvieron 5 medallas: Panamá 1 y México 4. Nicaragua, El Salvador, Guatemala, Honduras, Costa Rica y Belice ninguna. Al parecer para los comentaristas no hay problemas en el deporte en esos países. Incluso Canadá con 30 millones de habitantes alcanzó 18 medallas, 6 menos que Cuba.
¿Dónde están los pobres resultados?
Para muchos en el deporte como en todas las esferas de la vida, a Cuba no la miden con su entorno geográfico, sino contra Estados Unidos o los países europeos. En estos casos, también habría que analizar que Cuba obtuvo más medallas que Dinamarca, Turquía, Grecia, Finlandia, Portugal, Suiza, Austria, Bélgica, Suecia, la lista es larga.
En otros casos, la comparación es con ella misma, tomando los resultados en otras olimpiadas.
Esas evaluaciones obligará a los directivos del Instituto Nacional de Deportes y Recreación Física de Cuba a meditar, analizar y resolver los problemas, indisciplinas, tácticas, estrategias y dificultades que confrontan, como si fuera un país del primer mundo. Hay que vencer el bloqueo, las agresiones, la compra o robo de atletas, la corrupción de jueces y arbitros y las campañas calumniosas.
Esperamos que los dirigentes de ese Instituto, sus especialistas, entrenadores y deportistas hagan un analisis profundo de los errores, fallas, indisciplinas y diversos problemas, que son los que nos interesan, dejemos el mundo correr. Sólo un análisis autocrítico serio nos hará más fuertes. El esfuerzo, dedicación y recursos que tienen a su disposición, exigen que podían dar más y merecían un mejor lugar en la lista de los medalleros, pero independientemente de todo esto, Cuba marcha a la vanguardia en el deporte del continente.
Llama la atención que pocos hablan de un derrumbe deportivo en Estados Unidos donde la República Popular China obtuvo 15 medallas de oro más que ese país.
El motivo de este artículo es detenernos en el nivel cultural alcanzado por los deportistas cubanos.
Cuando las preparativos para unas olimpiadas en la década el 80, el reconocido periodista y locutor, Douglas Fernández Montes de Oca, quien trabajó muchos años en Radio Habana Cuba y Radio Rebelde, nos visitó muy preocupado y en cierto modo enojado. Dijo: